La tecnología actual nos lleva al suicidio: ¡Detengan la construcción de centros de datos ya!

¡Vaya, vaya! Parece que la ONU ha despertado del letargo y ha dado la voz de alarma sobre la construcción desmedida de centros de datos. ¡Y no me extraña! ¿Qué necesidad hay de tener tantos centros de datos funcionando a toda máquina si al final lo único que hacen es consumir recursos a una velocidad vertiginosa y contaminar nuestro planeta? Claro, el marketing de las grandes tecnológicas nos vende la idea de la nube como algo inofensivo y casi divino, pero la realidad es que detrás de cada selfie que subimos a Instagram hay un coste ambiental que muchos prefieren ignorar.

¿Se han parado a pensar en la cantidad de energía que se necesita para mantener en funcionamiento todos esos servidores? ¡Si hasta las luces de mi barrio se apagan cada vez que una nube pasa por delante del sol! Y no me vengan con que la tecnología es el futuro y bla bla bla. ¿Qué futuro queremos construir si estamos destruyendo el único planeta que tenemos? ¿Es que acaso nadie se acuerda de cómo era todo antes, cuando las cosas duraban más de dos años y no teníamos que estar actualizando constantemente nuestro software para seguir siendo "relevantes"?

Como ex-técnico de televisores, he visto cómo la obsolescencia programada se ha ido imponiendo poco a poco en todos los ámbitos de la tecnología. Antes, un televisor podía durar décadas si se le daba el cuidado adecuado, pero ahora parece que si tu smartphone no se autodestruye al año de comprarlo es porque algo ha fallado en el diseño. Y ahora nos quieren vender la idea de la Web 3.5 como si fuera la salvación de la humanidad. ¡Venga ya! ¿Acaso no hemos aprendido nada de nuestras experiencias pasadas?

Es hora de detener esta locura antes de que sea demasiado tarde. La construcción de más centros de datos solo nos lleva un paso más cerca del precipicio. Necesitamos ser más críticos con las novedades tecnológicas y exigir que se respete el medio ambiente en lugar de destruirlo en nombre del progreso. ¡Despierten, señores! El suicidio anunciado está cada vez más cerca, y si no hacemos algo al respecto, seremos cómplices de nuestra propia destrucción. ¡Detengan la construcción de centros de datos ya!